Honestidad vs. eficiencia
Dos de cada tres electores declaran que votarían por un candidato honesto, aunque sin experiencia en gestión pública, antes que por un candidato eficiente, aunque con imagen de corrupto.
El prelanzamiento de Lourdes Flores a la Alcaldía de Lima como la candidata de la decencia apela seguramente a esta lógica pero para ganar las elecciones no le bastará con ese posicionamiento ya que algunos electores asumen que todos los políticos son corruptos, con lo cual la bandera de la honestidad no resulta convincente, mientras que para otros resulta difícil de creer que el candidato de sus preferencias sea una persona corrupta.
Lourdes Flores es considerada la mejor candidata para combatir la corrupción, pero Álex Kouri la supera en la percepción de ser el más preparado para ordenar el transporte, la seguridad ciudadana, construir obras y prestar atención a las necesidades de los más pobres.
La probable candidata del PPC tiene que desarrollar pronto una estrategia para persuadir al electorado indeciso que tiene la capacidad de atender con imaginación y eficiencia los problemas de la ciudad de Lima si aspira a derrotar al actual presidente regional del Callao y ex alcalde de la ciudad portuaria.
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